Si conoces algún aficionado al running, te vendrá bien saber que hay cosas que, aunque las pienses, es mejor no preguntar:
“¿Otra vez vas a salir a correr?” Sí, otra vez voy a salir a correr. No me basta con correr un día a la semana, me da igual que haga frío, nieve, viento o 40ºC a la sombra.
“Te estás quedando muy delgado, no adelgaces más” No adelgazo porque quiera, es el efecto secundario de levantarse del sofá y salir a correr.
“¿Cuantos kilómetros corriste?, eso no es nada” Siempre está el típico imbecil que dice “¿x kilómetros?, eso no es nada, yo cuando joven corría maratones sin entrenar ni despeinarme”. Me da igual lo que hayas hecho en tu mundo imaginario, yo soy feliz corriendo 5, 10, 21 o 42 kilómetros y te lo puedo demostrar cuando quieras.
“No corras mucho. Si te cansas, para” Típica frase de madre. Creo que cada vez que salimos a correr nos imaginan tirados en una cuneta, agonizando con la lengua fuera y sin nadie en muchos kilómetros a la redonda, si noto que me encuentro mal, el primero que va a parar soy yo. Soy runner, no masoquista.
“Correr es muy aburrido” Puede que pienses eso, tú te lo pierdes. Solo el que ha sido capaz de correr más de 1 hora seguida es capaz de entender lo gratificante que puede llegar a ser el running.
“Correr es malo, te destroza las rodillas” Gracias por el consejo, cuando te pregunte y me interese, dame consejos . Ahora resulta liberar estrés, producir endorfinas y mantener corazón y pulmones sanos es malísimo para la salud.
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